¿Cómo adaptar la autenticidad de un restaurante con más de 70 años de vida a las nuevas exigencias del siglo XXI? Una delicada reforma interior de Pulsen pudo revitalizar el local cumpliendo con todas las normativas
La Bodega Sepúlveda se fundó en 1952 y ocupa un local centenario. Todas las intervenciones tenían que conservar y realzar su genuino aspecto tradicional.
El local pertenece a un edificio que se encuentra en el Eixample. Consta de 3 pisos en los que hay cocina, zona de bar y restaurante, almacén y baños.
Pulsen hizo una reforma global de la totalidad del local, sin afectar ningún elemento estructural, cumpliendo con la normativa. El objetivo era devolver el aspecto auténtico de la bodega desde una óptica contemporánea y mejorando la comodidad de trabajadores y clientes.
En el piso de arriba se niveló el pavimento, colocando otro nuevo sintético. Las vigas y carpinterías de madera recuperaron su color natural gracias al decapado. Se repararon las paredes y se colocó sobre ellas el papel pintado y revestimiento, junto a un arrimadero de madera. Se instalaron armarios a medida tipo vitrina de madera y cristal. Por último, se revistieron con madera las escaleras hacia la planta baja.
En la planta baja también se colocó nuevo pavimento. Si observamos la entrada, se cambió el sentido de la apertura de la puerta, mientras que se cerraron los contadores exteriores con puerta con paño. En esta planta también se trataron las vigas de madera, homogeneizando su color con el barnizado. En las paredes, bajo los espejos, se colocó un nuevo revestimiento para sustituir a los paneles de madera. Los barriles que se muestran de forma tan característica en la Bodega Sepúlveda fueron dotados de un nuevo apoyo.
En la planta sótano se ajustaron las alturas según la legislación, para lo que hubo que rebajar el pavimento y diseñar unas nuevas escaleras para salvar la altura. También se crearon estanterías realizadas a medida. Para la cocina se instalaron los nuevos pavimentos, un nuevo falso techo y el alicatado de la pared. El recinto cuenta con una nueva maquinaria de cocina, con un revestimiento de chapa inox encima. Se creó una cámara de residuos. Se realizaron los acabados decorativos finales.
Se actualizaron las instalaciones de la nevera de entrada, que se convirtió en un espacio de bienvenida. Unos nuevos focos y luces sustituyen los anteriores y adaptan el tipo de luz al nuevo diseño de todo el interior del local.
Se incluyen todas las medidas necesarias antiincendios en todo el local, especialmente en la cocina. Además, se incide en todas las medidas de seguridad y evacuación.
Pulsen renovó todas las instalaciones de fontanería y electricidad y se modificaron todas las instalaciones con regates en la pared.